Los Deportes y Negocios se parecen demasiado

Bienvenidos de nuevo al Blog de JVM Business Consulting, un espacio donde encontrarán temas relacionados a negocios, productividad para PYMES y liderazgo.

Hace un par de semanas desde la última entrada del Blog y han pasado muchas cosas interesantes. Les cuento que entre mis hobbies hay uno que me apasiona tanto como los negocios, y es ser Coach de Hockey. Desde hace 5 años que incursioné en esta actividad primero como Coach de Hockey sobre Hielo y ahora sobre ruedas. El poder participar y aportar algo a los equipos que he manejado me ha llenado de satisfacción y orgullo, pero también de mucho aprendizaje.

Recientemente estuve en Monterrey con el equipo actual que coacheo, y durante el Torneo en el que participamos estuve reflexionando sobre la importancia que tiene el deporte en la vida de los seres humanos. Y me di cuenta que el deporte tiene una gran similitud con el mundo empresarial. Por eso, esta entrada del Blog se enfocará en explicar algunos puntos similares entre ambos mundos.

1.- Tanto en los deportes como en los negocios debes conocer cuál es el perfil que tienes para elegir el adecuado.

En mi experiencia como coach me he dado cuenta que no todos los niños tienen el perfil para practicar hockey; es un deporte rudo, que requiere fortaleza mental, facilidad y apertura para el trabajo en equipo, sentido de la disciplina, entre otras características. De igual modo para los negocios, no todos los empresarios cuentan con el perfil para adquirir franquicias, por ejemplo. Algunos tienen un perfil más conservador y otros más agresivo. Es importante conocer qué tipo de preferencia tenemos referente al riesgo al momento de invertir en un negocio.

De igual modo el gusto y atracción hacia un deporte no puede ser impuesto por los papás hacia sus hijos, debe nacer de ellos; de lo contrario no lograrán los objetivos y beneficios que el practicar deporte ofrece. En el caso de los negocios, tampoco debemos iniciar uno si no nos sentimos en el momento adecuado y si no nos llama la atención; de lo contrario podemos poner en riesgo nuestro patrimonio.

2.- Se debe contar con un plan.

En los deportes, cualquiera que sea, se debe contar con un plan de desarrollo. Muchas veces criticamos a los competidores olímpicos de países líderes y medallista porque sus deportistas se preparan desde corta edad. Sin embargo los programas de desarrollo con los que cuentan son los que permiten que sus competidores logren resultados de excelencia. Normalmente estos programas abarcan desde el punto alimenticio, psicológico, técnico y táctico, debe ser integral para que dé mejores resultados.

En el caso de los negocios es indispensable contar con un plan de crecimiento, del que mucho hemos hablado en entradas anteriores del Blog. Este plan debe considerar desde la incubación del negocio, proyecciones de venta, análisis para toma de decisiones, planes de contingencia, entre otros.

El realizar cualquier actividad sin un plan es ir a la deriva, sin un rumbo marcado y sin ejecutar acciones concretas para lograr un resultado óptimo.

3. La paciencia y constancia son valores indispensables.

En mis años como entrenador he visto jugadores con gran potencial, con ideales grandes para llegar muy lejos. Sin embargo, a veces la impaciencia y la falta de constancia los han llevado a tirar por la borda todos los planes y objetivos que podían lograr. Nunca sabrás si estás cerca de encontrar un diamante sino sigues picando piedra.

De igual modo para el mundo empresarial, la falta de paciencia es un factor que hace quebrar negocios. Muchos emprendedores se quedan a la mitad del camino al éxito porque se cansan de esforzarse y no ven resultados inmediatos. Recuerda que el éxito empresarial no es una carrera de 5 kilómetros, sino un maratón. Debes estar dispuesto a trabajar duro sin flaquear y sin dudar hasta que tu esfuerzo de resultado. No te desanimes si ves que otras personas con ideas similares a las tuyas tienen resultados antes que tú. Recuerda que lo que le funciona al vecino no siempre aplica para ti. Pero lo que sí es un hecho que mientras seas paciente y constante llegarás a la meta. No importa el momento en el que llegues, si es rápido o tardado, lo importante es llegar.

4. El trabajo duro paga bien.

Esta frase me gusta mucho repetirla con mis jugadores. La principal diferencia entre un equipo ganador, un deportista campeón y un perdedor es qué tan duro trabajan para llegar a ser los mejores. El mundo del deporte es, por naturaleza, de competencia. Y mientras un equipo se prepara para un partido, habrá 4 o 5 o 10 más que se preparan con igual o mayor esfuerzo para vencerlo. Es por eso que en la medida que trabajan duro obtendrán grandes resultados. No hay partido que no se gane sino es desde el entrenamiento.

Para el mundo empresarial aplica lo mismo. Hoy en día vivimos en un mundo globalizado donde tu competencia no sólo es local, sino internacional. Es por eso que debes trabajar el doble, triple de duro que los demás, si quieres posicionarte como un líder en el sector en el que te encuentres. Seguro has escuchado que el descanso es para cuando hayamos muerto. Y de algún modo es cierto, en el mundo de la competencia no podemos aflojar, porque un descuido puede dejarnos fuera del panorama.

Cómo observas existen varias similitudes entre el deporte y los negocios, seguro tú estás pensando en otras más, así que te invito a que las compartas en los comentarios.

Algo que es importante es que debemos crear más conciencia en inculcar la importancia que tiene la cultura empresarial en nuestro país. Nuestro sistema educativo poco aporta de este tema a los niños desde temprana edad. Y así como es importante hacer conciencia de practicar deporte por salud biológica, también debemos enseñar a los niños y adolescentes que el saber administrar un negocio, saber invertir es importante para su futuro.

Ayúdame a compartir esta entrada que espero haya sido interesante. Te deseo excelente regreso de vacaciones y si aún tienes días libres aprovecha para trabajar en algo que te ayude a acercarte más a tus objetivos personales. Recuerda que nunca hay que bajar la guardia, “el trabajo duro paga bien”